30/12/08

"A favor de la libertad de los pueblos"


Frase célebre en la boca de muchos diplomáticos y luchadores sociales y/o políticos, pero ¿A qué se refieren realmente?, ¿Cuál es la libertad tan defendida? y ¿Cuáles pueblos?. Sencillamente pensamos y hablamos de "una" lucha por "una" libertad de "unos" pueblos pero realmente no sabemos la respuesta ni la sustitución de esas comillas. La verdad es una y siempre lo será, la libertad siempre implicará un mismo sentido, la lucha también incluye a un ganador y a un perdedor, los pueblos siempre serán aquellos donde habiten personas... Entonces, ¿Por cuál pueblo y por cuál libertad estamos luchando?, aquella que nos inspira matar a unos, golpear a otros, excluir a unos cuantos, incluir a cierto grupo, un sin fin de acciones que quizás estén muy lejos de hacer justicia o de "una lucha a favor de...". Entiendo que todas estas situaciones de guerras y conflictos son naturales y están pre-establecidas desde el comienzo de la historia, de la vida, desde el comienzo de todo, pero así como es necesario que las luchas sucedan a nivel personal y a nivel societal; también es necesario que se hagan análisis profundos de lo que se afecta, lo que se pierde, lo que se gana, lo que se genera y lo que se mata. La inocencia de un niño se ve afectada, madres quedan sin hijos y viceversa, hambre, enfermedades, oriundos y extranjeros, todos nos vemos afectados por las decisiones que se toman día a día con la frase tan célebre y a la vez tan falta de un verdadero significado. Me refiero a cualquier tipo de luchas y guerras, no hay una en específico. Toda lucha a raíz de frases como ésta y muchas otras, trae como consecuencia la sucesión de venganzas y de supuestas justicias.
Yza Mavarez

"Si el hombre dice justicia, venganza es lo que se escucha" (Anónimo)

29/12/08

No entran balas...


¿Han estado alguna vez con personas con las que hablan y nada de lo que se les dice es cierto? ¿O beneficioso?...
Es triste saber que las personas sólo oímos y reaccionamos en defensa de "nuestras razones", pero no nos permitimos ESCUCHAR y prestar atención a las cosas que nos pueden ser bastante útiles.
El ser humano está acostumbrado a oir los sonidos emitidos por un emisor; valga la redundancia, mas no a entender y comprender el mensaje que se nos quiere dar. Lo complicado del asunto es cuando nos acostubramos a llevar este estilo de vida donde nada entra en nuestros oídos y por lo tanto los consejos, conocimientos y demás saberes rebotan a nuestro entendimiento y no producen cambios o mejorías en nuestra persona. Habrá momentos donde será obvio que un comentario o un consejo no será del todo una verdad o de beneficio para alguien; sin embargo, ¿Cómo podremos diferenciar entre un mensaje bueno y uno malo si creamos una cultura o una personalidad donde "no entran balas" y permanecemos inmunes a las críticas? Quizás esto vaya más allá de aprender a escuchar y tomar acción acerca de lo que nos dicen, quizás (y estoy segura que sí) la capacidad de recibir una crítica vaya dentro de lo psicológico y emocional, en la crianza o una serie de factores más profundos, pero de igual manera nos impide un crecimiento y mejorar lo que somos; esto no es sólo al escuchar sino al leer, al estudiar e incluye cada ámbito de la vida que llevamos. La reflexión sobre "La cabeza bien puesta", publicada anteriormente, tiene mucho que ver con lo que trato en este momento. Necesitamos (ahora que comenzamos un nuevo año) adiestrar nuestro canal auditivo para recibir tips y conocimientos necesarios que fluyan en dirección al cerebro y nos ayude a tener un equilibrio entre lo que sabemos, lo que no sabemos, lo que necesitamos saber y/o cambiar.
Yza Mavarez

"Valor es lo que se necesita para levantarse y hablar; pero también es lo que se requiere para sentarse y escuchar". Winston Churchill

9/12/08

Los gases


Coloqué el título con el pleno propósito de que se preguntaran ¿Y ahora de qué va a hablar?, precisamente, como siempre, quiero hacer una reflexión acerca del daño que estamos ocasionando a nuestra hermosa tierra. No basta con que soporte nuestras malas costumbres y quejas si no que también nos está pidiendo a gritos que la cuidemos.
El calentamiento global no es más que la acumulación de gases y calor en la atmósfera, lo que conduce a que el planeta se recaliente en lugar de seguir el ciclo natural y sano del efecto invernadero, el cual se encarga de permitir que salgan al espacio esos gases emitidos por los países más industrializados y nuestra cochinada, ¡disculpen!, nuestra contaminación. Es decir, lo que estamos enviando a la atmósfera con nuestras geniales ideas de industrialización, tala de árboles, botar basura a la calle, no reciclar, usar productos altamente contaminantes, utilizar cinco bolsas de mercado para cargar un pudín al salir del supermercado (porque necesitamos más bolsas para ser más aseados), y un sin fin de cosas que hacemos, están ocasionando que este globo que nos dio Dios para habitar, se recaliente y finalmente ocurran desastres naturales como el gran calor que hace a horas del mediodía o las terribles lluvias que han dejado a tantas personas sin hogar en estas fechas . Entonces, es hora de cuidar el planeta. Es responsabilidad de todos.

"La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal sino por los que se sientan a ver lo que pasa" Albert Einstein

Yza Mavarez

8/12/08

Navidad


Navidad, tiempo de compartir, tiempo de alegría, tiempo de ferias y regalos, de cohetes y abrazos. Navidad, tiempo donde celebramos (aunque muchos nieguen la época) el nacimiento del Salvador, aquel que nació en un pesebre y que desde la planificación de su venida a la tierra se negó a él mismo. Sin importar ser Dios, se convirtió en hombre y nos dio ejemplo de humildad, nobleza, mansedumbre, paz, sabiduría y un sin fin de cualidades. Navidad, época donde conmemoramos su nacimiento en un pesebre pero también en nuestros corazones. Navidad, tiempo de comer hallacas, pan de jamón, torta negra, compartir y cantar villancicos, parrandas y gaitas. ¿A quién no le gusta la Navidad?, ¡A todos nos gusta! Pero, un momento, ¿Qué hay de aquellos que no tienen donde vivir, donde comer, donde dormir siquiera? Aquellos que prefieren no contarles a sus hijos de la existencia de un "Niño Jesús" porque no tienen que regalarles, aquellos que lloran cuando cae un "triqui-traqui" porque se les cae el rancho, aquellos que un pan de jamón les cuesta velar hasta que caigan las migas, aquellos que lloran en hospitales, aquellos... Esos "aquellos" pueden estar muy cerca de nosotros y con nuestra fiesta (que no critico) puede que no los veamos o no los pensemos. Creo, siento y pienso que siempre habrá algo que hacer por nuestros "aquellos". Una sonrisa, un abrazo, un cariño, un presente, una comida, una enseñanza; puede cambiar una vida y puede ayudarnos a celebrar esta época juntos. Piensa en cada persona que necesita algo físicamente y aún más espiritualmente. Haz algo porque ellos sientan la alegría dicembrina también.

"Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo (...) porque nos has amado desde antes de la fundación del mundo (...) que el amor con que me has amado esté en ellos y tú con ellos" San Juan 17:2-26

Yza Mavarez

6/12/08

Para pensar


¿A veces no se han puesto a pensar en las paradojas del comportamiento humano?
Estaba en un taller en la universidad el miércoles y mientras escuchábamos a la persona que exponía, unos chicos comenzaron a repartir unos yogurts. Mientras repartían el refrigerio, un 60% de las personas presentes en el salón comenzaron a verse y a decir: Estos "yogures" deben estar "piches" para que nos los estén regalando.
Ahí fue cuando comencé a dilucidar acerca del comentario y de las actitudes que tenemos ante situaciones simples o algunas más difíciles y les coloqué el ejemplo o caso contrario; que no se repartiera el refrigerio, y aposté a que el mismo porcentaje preguntaría: ¿Es que acaso no nos van a dar refrigerio?

El ser humano realmente es complejo. "Vamos al cielo y vamos llorando".

"El cuerpo humano no es mas que apariencia, y esconde nuestra realidad". Victor Hugo

Yo agregaría: (...) nuestra realidad. Una gran necesidad.

Yza Mavarez

Hablando de exclusión...


Ayer estuve en un famoso centro comercial de la capital venezolana, daré coordenadas pero no diré cual!... simplemente resumiré mi experiencia en: ¡Recuerdenme no volver a ese sitio!. Para mí fue una gran desilusión entrar en él. Yo iba con expectativas de conseguir cosas bellas, que quizás compraría algo, comería con mi mamá en la feria, etc. Todo un mundo de fantasía, ya que cuando llegué lo primero que busqué fue la feria y... ¡NO HAY! ¿No hay feria?, busqué una tienda de ropa a la que me gusta frecuentar por lo menos a ver y... ¡NO HABÍA! es una experiencia sorprendente entrar en ese centro comercial. Está bien, hay gustos, y evidentemente hay clases sociales. No soy amante del tema del Estado y sus clases sociales pero sinceramente esto me remitió a mis conocimientos sobre exclusión.
Excluir: Echar a una persona del lugar que ocupaba, no hacer entrar, eliminar. (Diccionario escolar Larousse. 1980).
Yo pude caminar y de alguna manera tolerar que no hubiese una feria con pollo frito o pizza, pude tolerar que no hubiese sino cafés, etc., lo peor es que estaba lleno el estacionamiento. Sinceramente pienso que es una manera de excluir lo que se respira en ese "mall", ya que si una persona ignorante va (como yo en este caso) de lo que allí hay o no hay, pues se puede entender como una manera de decir que en él entran, pasean y comen las personas que pueden tomar la responsabilidad de gastar un porcentaje de dinero por encima que en otros locales y centros de recreación. Es una queja del mundo que estamos construyendo, si bien se puede leer que el que no tiene dinero no entra, también puedo entender que sólo entra un grupo y si leo eso, es implícito que hay un grupo GRANDE que no entra al lugar por políticas "intrínsecas" de tal lugar y eso también es exclusión.
Más que reclamar o quejarme o hablar cosas, quiero llevar este ejemplo a cuando hacemos exclusión en otros ámbitos. No podemos ir por la vida dando lugar a nuestras prioridades sin ni siquiera pensar si podemos ser un instrumento para que otros cumplan sus sueños, sus metas, aprendan de nosotros o viceversa, conozcan o lleguemos a ser parte de ellos. U otro ejemplo: cuando a veces pedimos que llueva sin pensar que otro pide que no llueva porque se le cae la casa. Quizás debemos ser más "incluyentes".

El legislador no debe proponerse la felicidad de cierto orden de cuidadanos con exclusión de los demás, sino la felicidad de todos.
(Platón)
Yza Mavarez

1/12/08

La cabeza bien puesta


Bueno, esta vez escribo acerca de algo que pude leer del famoso Edgar Morin en su libro "La cabeza bien puesta".
Morin expone en su libro ciertas características y paradojas que te ponen como a pensar y a comprender que realmente es cierto aquello de que usamos apenas un pequeño porcentaje del cerebro y que si lo utilizasemos en un porcentaje mayor (y ni hablar si fuese completo) podríamos aportar grandes pensamientos y descubrimientos a la humanidad, a la ciencia y al bienestar que tanto se busca.
Un profesor de la universidad me mandó a leer este libro y fue profundo para mí memorizar sin querer una frase como esta: "más vale una cabeza bien puesta que una cabeza repleta" y tiene como apoyo la frase más cristiana y coloquial de: ¿Qué haces sabiendo toda la Biblia y no pones en práctica ni la mínima parte de lo que sabes? ¿Se comprende? Es decir, ¿Qué hacemos día a día leyendo y nutriéndonos de conocimientos, realizando conexiones neuronales para que se queden almacenadas en el cerebro? Pues, es la realidad y trataré de dar la idea del libro (o lo más importante) en estos párrafos.
Ciertamente es necesario darle un giro a la manera que tenemos de pensar y poner en práctica. Pareciera que no hubiese conexión alguna entre los dos verbos. Leemos, estudiamos, aprendemos pero no aprehendemos y eso es un gran problema. Es necesario hacer un giro principalmente en la sociedad y su manera o "sed" de aportar algo nuevo a sus vidas propias y a la humanidad, luego se modificaría la escuela o institución; que no es más que el reflejo de la sociedad y viceversa, después se mejoraría la verdadera misión de los educadores y de esa manera la de los estudiantes (y aún los profesionales). Suena fácil y como una receta de cocina pero no lo es. Debemos comenzar a reformular el pensamiento y pensar en la reforma del mismo. Pero tanta tarea no es fácil si la pensamos como Cerebro: "Tratar de conquistar al mundo", sino que pudiésemos comenzar a hacerlo uno por uno, siendo responsables de lo que estamos aprendiendo y para qué lo hacemos, lo enseñamos y lo multiplicamos. ¿Será?.

Muerte: "Recuerda que cuando abandones esta tierra, no podrás llevar contigo nada de lo que has recibido, solamente lo que has dado: un corazón enriquecido por el servicio honesto, el amor, el sacrificio y el valor." San Francisco de Asís

Yza Mavarez

¿Me "mimetizo" o soy?


Ante la realidad que se observa día a día es posible comprender que vivimos en un mundo cambiante y extraño. Muchas veces me he preguntado si habiendo un sólo planeta es posible que haya personas que no nacen en él.
Sinceramente quiero exponer un asunto de vida o muerte!, y es el sencillo caso de nacer, crecer y vivir siendo quienes somos o simplemente "conformarnos" o "mimetizarnos"; lo cual se refiere a tomar e imitar la forma o ademanes de algo o alguien, sumergirnos en una realidad siendo parecidos o iguales, pasando desapercibidos o simplemente ser uno más del montón.
Observaba con detenimiento una película que no recuerdo como se llama (buen detalle), que narraba la historia de un chico de bachillerato por allá por los Estados, que vivía una vida "trágica" porque tenía un tamaño (hablando de estatura y peso) diferente, un cabello diferente, una inteligencia diferente y muchas otras diferentes cosas. En resumen, el chico pasaba por humillaciones dentro de su entorno liceísta porque había un grupúsculo que se tomaba la grandiosa tarea de maquinar situaciones embarazosas para el chico (simepre van a existir). Cada vez que este pasaba por una cosa de estas, iba con su abuelo y le contaba lo que le sucedía y éste (el abuelo) le respondía con cierta sabiduría: "Eres distinto y eso no es un problema, cuando hagas las cosas y los demás no lo acepten o toleren, sólo dí a ti mismo: al diablo lo que opinen los demás!". Bueno total del cuento es que el chico logra ser lo que quiere ser, con la chica de sus sueños, etc., porque aprendió que su teoría era de gran ayuda. La teoría realmente se basaba en que una partícula extraña o diferente dentro de un sistema regular podía causar dos situaciones: La desaparición de la misma o que el resto del sistema se acostumbre y tolere.
En mi opinión, no es que se deba mandar al diablo a la gente, pero es triste entender que para las personas distintas existen dos opciones también: O te "mimetizas" y conformas con el resto del mundo finalizando en tu propia extinción; o simplemente eres tú y que los demás se acostumbren a quien eres. Obviamente APLAUDO la segunda opción.
La moraleja de todo este rollo es: La gente no va a estar acostumbrada ni muy dispuesta a recibirte si vistes, hablas, te mueves, o eres distinto a ellos. Así que, como el mejor ejemplo de todos: Jesús, sé una partícula diferente siempre y cuando enseñes a otros lo correcto. Insto a los lectores a que esos estilos particulares siempre existan y que se acabe el patrón a seguir de la sociedad. Sé distinto, compórtate a la altura y demuestra a otros que se puede vivir mejor así.
La gente y la sociedad en sí está acostumbrada a ver a "cardúmenes" (término usado a drede) de personas con malas caras, malas respuestas, mala salud, malas costumbres, mal humor, mal todo!, el ser distinto no te va a ser inferior ni inmaduro, simplemente sé diferente, demuestra el "Baygón"(matachiripas) de la sociedad de normales: Sé feliz.
"Tu vida puede ser la única Biblia que muchos lean." Anónimo

Yza Mavarez